Es una hortaliza que pertenece a la familia de las umbelíferas, también denominadas apiáceas, y considerada la especie más importante y de mayor consumo dentro de esta familia. Es la forma domesticada de la zanahoria silvestre, oriunda de Europa y Asia sudoccidental. Se cultiva por su raíz mucho más grande, sabrosa y de textura menos fibrosa, pero continúa siendo la misma especie.
Componentes activos:
El aceite esencial de la semilla de zanahoria es destilado de las semillas de la zanahoria común. Su aroma es seco, leñoso, algo dulce y atierrado. En perfumería este aceite es apreciado por la nota grasosa que pone en los perfumes orientales.
Terapéutica: baños, inhalaciones, vaporizaciones, fricciones y masajes. Entre sus usos tradicionales es usado para tonificar y rejuvenecer pieles maduras, arrugas y cicatrices, alivia eccemas y psoriasis y es un estimulante de los sistemas linfáticos y de defensa.
Beneficios aromaterapeúticos: considerado como particularmente benéfico en masajes para pieles maduras y secas y ayuda a restaurar la elasticidad de la piel y reducir por lo tanto las arrugas. Alivia el estrés y la ansiedad. Nutre y estimula.
Combina bien con: lavanda, geranio, enebro, bergamota, cedro, naranja, limón, nerolí, petitgrain, romero y lima.
Precauciones: Sólo uso externo.
Contraindicaciones: No hay conocidas.