Es una especie originaria de Asia tropical que se cultiva hoy en día en África oriental, Madagascar y el Caribe. El aceite esencial se obtiene por destilación con agua o al vapor de los capullos aún no abiertos de las flores o de las hojas del árbol su rendimiento es muy elevado del 15 al 20%. El aceite es más pesado que el agua y tiene un color amarillo que se vuelve pardo cuando entra en contacto con el aire, su aroma es fuerte y dulzón.
Componentes activos: eugenol (80-90%), aceteugenol, cariofileno, óxido de cariofileno y otros.
Muy utilizado como condimento, combate la flatulencia, los dolores gástricos y abdominales, diarreas e infecciones del tracto digestivo. Es estimulante y analgésico.
Se considera afrodisíaco, estimula la mente y la memoria, mejora la respiración, ayuda a superar los estados de agotamiento, aunque en dosis excesivas puede ser soporífero.
Aleja los insectos.
En cosmética se emplea para añadirlo a jabones y perfumes
Es antiséptico y analgésico, se emplea en compresas para luxaciones, favorece el sueño. Debido a su efecto localmente anestésico, desinfectante y cicatrizante. La esencia de clavo pertenece al equipo básico de todo dentista. Muy adecuado para ser incluido en lociones bucales y pastas de dientes. Internamente es útil para los trastornos digestivos y previene las enfermedades infecciosas.
Terapéutica: se emplea para el tratamiento de acné, contusiones, quemaduras, cortes y heridas.
Combina bien con: esencias cítricas, lavanda, rosa, vainilla, ylang-ylang y otras especias.
Precauciones: usar en dilución normal o débil, nunca concentrada. No aplicar directamente sobre la piel. No difusión atmosférica, puede irritar las mucosas.